5 mejores formas de atraer el talento

11 de enero de 2022por Albert Naudé

La pandemia, la evolución de la tecnología, el envejecimiento de la mano de obra y la forma en que la gente quiere trabajar hoy en día han sacudido la industria de la energía y los servicios públicos hasta el fondo. Este artículo analiza cuatro tendencias fundamentales que las empresas de servicios públicos deben tener en cuenta y adoptar en los próximos 18 a 24 meses.
El sector de la energía y los servicios públicos (E&U) es históricamente innovador en lo que respecta a la tecnología, pero el último año ha sacudido su forma de trabajar hasta el fondo.

El sector ha implementado nuevas tecnologías para ahorrar tiempo y dinero a los consumidores, aumentar la eficiencia energética y mejorar los programas de conservación ya en la década de 1970. Incluso ayudó a sentar las bases de la experiencia moderna del usuario en línea, asumiendo el procesamiento de transacciones en línea de gran volumen antes de que la mayoría de los usuarios y sectores entendieran las transacciones en línea.

Sin embargo, en lo que respecta a las personas y los procesos, E&U todavía tiene un camino que recorrer. Muchas de las funciones y procesos existentes en la empresa nunca experimentaron una verdadera transformación. En su lugar, las empresas pasaron a procesar la información de forma digital, sin adoptar todo lo que la tecnología puede hacer.

Hoy en día, especialmente tras la pandemia de COVID-19, muchas empresas de E&U se enfrentan a los resultados de la innovación sin transformación. Y aunque la tarea de abrazar la transformación operativa y cultural es desalentadora, hay algunas tendencias significativas que ayudarán a su empresa a dar el salto.

1. Negocios en cualquier lugar

Muchas organizaciones trabajan a distancia o instalan y adoptan nuevas herramientas de comunicación virtual. Pero la tecnología del trabajo a distancia es solo una de las formas en que los enfoques digitales están cambiando nuestra forma de trabajar y convivir.

Business Anywhere comienza con la evaluación de cómo se trabaja hoy antes de tomar decisiones que afectarán al mañana. Y aunque las herramientas digitales permiten a las organizaciones funcionar durante estos tiempos sin precedentes, desplegar nuevos procesos y gestionar la aceptación del cambio por parte de las personas es tan importante como la tecnología.

Si no le interesa convertirse en una empresa totalmente remota, es posible que tenga que emplear un lugar de trabajo híbrido. Este tipo de modelos combinan el trabajo virtual y el presencial para acceder a los "momentos serendipia" que se dan en un entorno de oficina, al tiempo que permiten a los miembros del equipo que prefieren trabajar con la cabeza en su propia casa tener esas oportunidades.

2. Confía en

La confianza no es algo extraño, ni siquiera en el trabajo. Pero a medida que la industria adopta más trabajo a distancia tras la pandemia, es esencial asegurarse de que se genera confianza en su organización. Esto no sólo es importante debido al trabajo a distancia, sino que es fundamental establecer la confianza para ayudar a gestionar el cambio organizativo, la comunicación y la formación para obtener valor de sus iniciativas estratégicas.

Pero es más fácil decirlo que hacerlo. ¿Cómo puede garantizar exactamente que la confianza forme parte de su organización? Cambiando la forma de medir los resultados de sus equipos. En lugar de comprobar cuántas horas han trabajado o cuántos descansos se han tomado, recurre a los resultados.

Para ello, necesita un marco de medición del rendimiento que le proporcione una visión holística de cómo su organización define el éxito. No base la medición del rendimiento en el número de contadores que leen sus equipos, en el grado de satisfacción de sus clientes o incluso en la precisión de su facturación. Recurra a una combinación de estas métricas, y tendrá una buena comprensión de cómo lo está haciendo su equipo, independientemente de dónde trabaje.

3. Hiperautomatización

La automatización puede aliviar parte de la complejidad del apoyo al personal remoto, dejando las tareas adecuadas a la máquina mientras los equipos remotos realizan el trabajo de conocimiento.

La automatización de procesos robóticos (RPA) ha sido durante mucho tiempo la opción más utilizada para la automatización. El software RPA, que se comporta como un participante en un proceso, puede replicar el comportamiento humano para realizar interacciones e integraciones de sistemas rutinarias, repetibles y basadas en reglas. Puede realizar todo, desde pulsaciones de teclado, clics de ratón y lecturas de datos hasta lógica y escrituras a través de las interfaces de usuario existentes.

  • Y como organización de servicios públicos, tiene la tarea de mantener sistemas separados de gestión de clientes, activos y trabajo.
  • Trabajar con tres sistemas dispares hace que cada tarea sea un poco más larga, y ahí es donde puede entrar la automatización de procesos.
  • Puede intervenir y actuar como la última milla de la integración para que sus equipos puedan trabajar de forma más flexible y eficiente.

Hoy en día, nuevas tecnologías como la hiperautomatización -la combinación de RPA, aprendizaje automático, procesamiento del lenguaje natural, integración de sistemas empresariales, ingestión y comprensión de documentos, etc.- pueden ayudar a asumir aquellos procesos que necesitan ir un paso más allá de la automatización.

Por ejemplo, teníamos un cliente de servicios públicos cuyo equipo financiero se estaba atascando en la persecución de facturas de saldo pequeño. Mediante una combinación de RPA e inteligencia artificial, creamos un bot que analizaba una factura y determinaba cuándo descartarla, perseguirla mediante la automatización o dejarla para la intervención humana.